La
Creación Política del Departamento de Junín
Nuestro
amigo Pablo Borja nos sugiere ampliar el asunto referente al departamento de
Junín “porque primero se llamó departamento de Tarma”. Tiene mucha razón. Hace
apenas hace tres días que el departamento de Junín ha celebrado su 190º
Aniversario, pues entonces es oportuno recordar parte de lo que se dijo el 13
de setiembre de 2011, en la ceremonia que el Club Departamental Junín realizó
en el local del Club Loreto, recordando sus 186 años. Asimismo le expresamos
nuestro agradecimiento por haber publicado en la edición 126 de la revista “El
Aguacero” la nota sobre “El Tren Lima-Huancayo debe recorrer todos los días”.
Don Justino Tarazona,
en su libro “Demarcación Política del Perú” nos dice que el Gobierno Independiente
del Perú adoptó la demarcación territorial dividida en departamentos,
provincias y distritos. Según el Reglamento Provisional del 12 de febrero de
1821, expedido en Huaura por el Protector don José de San Martín, los primeros
departamentos fueron Trujillo, Tarma, Huaylas y La Costa , y el 4 de agosto
siguiente se creó el departamento de Lima. En el Reglamento de Elecciones de Diputados
al Congreso Constituyente, del 26 de abril de 1822, apareció un cuadro de once
departamentos, incluidos Tarma y Huaylas. Al año siguiente, el 4 de noviembre
de 1823 el gobierno de José Bernardo de Torre Tagle promulgó la ley que unió a los
departamentos de Tarma y Huaylas en uno sólo denominado Huánuco, siendo su
capital la ciudad del mismo nombre. Y por decreto dado por el Libertador Simón
Bolívar el 13 de Setiembre de 1825 se cambió la denominación por departamento
de Junín, para perpetuar la victoria del Ejército Libertador sobre el ejército
español en la batalla del 6 de Agosto de 1824. Junín nació como departamento
con cuatro provincias: Huancayo, Jauja, Tarma y Yauli. Por decreto del Congreso
de 31 de Diciembre de 1851 se trasladó la capital de Huánuco a Cerro de Pasco´.
Y por Decreto Ley Nº 7001 de 15 de Enero de 1931 el presidente de la Junta de Gobierno Luis Miguel
Sánchez Cerro dispuso el traslado de la capital departamental a la ciudad de
Huancayo, que había recibido el título de “Ciudad Incontrastable” en virtud del
decreto del Supremo Delegado Torre Tagle el 19 de marzo de 1822. Pasco fue
provincia de Junín hasta que se hizo departamento en virtud de la Ley 10030 de 27 de noviembre
de 1944.
El
departamento de Junín se encuentra ubicado en la parte central del país, comprende
dos regiones naturales, la
Sierra , donde lo más relevante es la meseta y el lago de
Junín y la cordillera de Huaytapallana; y la Selva Central donde
están las provincias de Chanchamayo y Satipo. El clima es templado y seco, el
promedio de la sierra es de 14 grados y de la selva, 25. Limita por el norte
con los departamentos de Pasco y Ucayali, por el sur con Huancavelica y
Ayacucho, por el este con el Cusco y por el oeste con Lima. En Junín se
encuentra Ticlio, el punto ferroviario más alto del mundo, Chinchaycocha, el
lago más grande después del Titicaca, el Huaytapallana, uno de los nevados más
importantes de la cadena de los Andes.; el nevado de Pariacaca por donde pasa
el Qhapacñan Inca de Jauja a Pachacamac; su suelo está regado por el río
Mantaro y sus afluentes, cuyas aguas mueven las turbinas de la Central Hidroeléctrica
del Mantaro, en Huancavelica, para luego juntarse con el Apurímac y formar el
río Ene, ya en la selva.
A lo
largo de todas las épocas en la Región Junín
se han realizado importantes hechos históricos, aún antes de ser departamento, por
ejemplo: en 1534 Jauja fue fundada por los españoles como capital del Perú.
En 1742
Tarma y Chanchamayo fueron el centro de la rebelión de Juan Santos Atahualpa,
que durante 13 años mantuvo en jaque a las fuerzas españolas.
En 1813,
en Huancayo se juró la
Constitución liberal española de Cádiz, en la plaza que a
partir de entonces lleva el nombre de Constitución, donde se conserva una placa
que recuerda ese acontecimiento.
En 1820 todos
los pueblos de la sierra central, que pugnaban por su independencia, formando
guerrillas combatieron al ejército realista en apoyo del Ejército Libertador
del general Álvarez de Arenales, llegando a proclamar la independencia del Perú
el 20 de noviembre de 1820 en Huancayo y luego en Jauja y Tarma.
El 6 de
diciembre de 1820 el general Álvarez de Arenales derrotó en la batalla de Cerro
de Pasco al ejército realista de O’Reilly, quien fue hecho prisionero y enviado
a Huaura. San Martín, por este triunfo, los premió con una medalla con la
inscripción: “A los vencedores de Pasco”.
El 9 de
abril de 1821 en Concepción las heroínas Toledo dirigieron un movimiento
guerrillero que se opuso al paso del ejército del jefe español Jerónimo Valdés
cortando las amarras del puente Balsas, acción que dio lugar a que San Martín
le diera a Concepción el título de “Pueblo Heroico”.
El 6 de
agosto de 1824, en las pampas de Chacamarca, se ganó la Batalla de Junín, como
antesala de la Libertad
del Perú y América. Este hecho dio lugar a que Bolívar dispusiera cambiar la
denominación del Regimiento de Caballería Húsares del Perú por Húsares de
Junín, dar al pueblo de Reyes o Bombón el título de “Heroica Villa” de Junín
y al año siguiente llamar Junín al
Departamento.
El 24 de
abril de 1834 se dio en Jauja el “Abrazo de Maquinhuayo”, hecho que puso fin a
la guerra civil entre Luis José Orbegoso y Pedro Bermúdez, ahorrándole a la
patria lágrimas y sangre.
En 1839 Huancayo
fue sede del Gobierno, cuando el Congreso Constituyente convocado por Agustín
Gamarra sancionó la
Constitución de 1839 y en 1854 Ramón Castilla abolió la
esclavitud. En 1865, cuando el coronel Mariano Ignacio Prado se levantó en
Arequipa contra el gobierno del general Juan Antonio Pezet, que había asumido
la presidencia en 1863 tras la muerte de Miguel de San Román; Huancayo estuvo
entre los primeros en manifestar su apoyo y por decreto expedido en Ayacucho
por Pedro Diez Canseco se estableció en Huancayo la sede del gobierno, de julio
a octubre de aquel año.
En los
aciagos años de la Guerra
de Chile contra el Perú, el departamento de Junín fue escenario de épicas
jornadas de sangre durante la
Campaña de la
Breña , magistralmente conducida por el entonces General Andrés
Avelino Cáceres Dorregaray. Ahí están las acciones cumbres de la Contraofensiva del
Ejército del Centro: Marcavalle, Pucará y Concepción, con cuyos resultados y la
decidida acción de las fuerzas guerrilleras se había cambiado el curso de la
guerra, pero la traición de Miguel Iglesias permitió la derrota, la pérdida de
Tarapacá y Arica, el pago de cuantiosa indemnización, el robo de toda la riqueza
del Perú incluida su patrimonio cultural y la destrucción del aparato
productivo del país.
Y durante
la guerra civil que siguió a la desocupación del país, Cáceres planeó una
estratagema para destituir al presidente impuesto por los chilenos, mediante la
cual envió al coronel Justiniano Borgoño con un destacamento para resistir el
ataque de Gregorio Relayza, luego se replegó hacia Concepción simulando una
derrota, de acuerdo a lo convenido, y así Cáceres logró su cometido de
engañarlos y marchar sobre Lima, obligando la dimisión de Iglesias. Este hecho
registra la historia con el nombre de la Huaripampeada por haberse realizado en
el distrito de Huaripampa, provincia de Jauja.
Y ahora miremos a nuestra
institución: El 4 de junio del 2009, el Club Departamental Junín realizó un forum
con la propuesta de integrar los departamentos de Huancavelica, Junín y Pasco
en una Macro Región como estrategia de desarrollo, porque según su autor, por
entonces vicepresidente Rafael Samaniego Q.E.P.D., esta es la condición “sine
qua non” para que estos pueblos puedan salir del atraso y marginación en que se
encuentran. Se trató de responder a las siguientes preguntas: ¿Por qué tanta
pobreza en estas tierras tan ricas en agua, minerales, bosques, ganadería,
agroindustria, agricultura de abastecimiento y otros recursos naturales? ¿Por
qué tanto atraso en las regiones que proveen de agua para el consumo
poblacional y el riego de la gran agricultura de la costa y más del 40 por
ciento de la energía hidroeléctrica?
Durante los
últimos años los indicadores macroeconómicos nacionales muestran un importante
crecimiento, debido a las mayores inversiones en actividades extractivas como
la minería y la agro exportación, pero dicho crecimiento no sólo ha sido
diferente en todo el país, sino que también ha sido distribuido en forma muy
desigual en la mayoría de la población, principalmente andina y rural. Según el
evento mencionado la causa principal del problema está en el centralismo, y para
que estas regiones puedan salir de esta situación se planteó la estrategia a
seguir partiendo de varios ejes de desarrollo:
En
primer lugar, la integración de las regiones de Huancavelica, Junín y Pasco en
una sola Región, con el objetivo de que tenga una sola administración eficiente
para cumplir con un programa de desarrollo dentro de un proceso de verdadera
descentralización; de constituir una región más grande territorial y
poblacionalmente y disponer de más recursos naturales: agua, minerales, riqueza
forestal, energía eléctrica y vías de comunicación; y que la nueva región
cuente con mayor poder social y político para demandar una descentralización
más acelerada, incrementando la participación en la transferencia de
competencias y asignación de presupuestos.
El
segundo aspecto es la reivindicación de los recursos naturales, es decir, que la Macro Región tenga una mayor
participación en la gestión de los ingentes recursos naturales, con la
finalidad de incrementar los ingresos o recursos propios que puedan servir para
el financiamiento de un plan de desarrollo que permita compensar el atraso
actual generado por la exclusividad centralista.
Un
tercer eje viene a ser la
Industrialización , la estrategia propone priorizar la
industrialización, porque es el único camino que conduce al desarrollo de la
nueva región; sin ella, no hay ni ingresos ni puestos de trabajo, y para generar
condiciones de desarrollo es necesario crear las “ventajas comparativas” que
hagan atractiva la inversión de capitales en proyectos industriales, que deben
ser públicas, privadas y asociadas, para la grande y la pequeña industria,
generadores de empleo y valor agregado.
A
continuación está la optimización de los proyectos sectoriales que, según la
propuesta, debe incrementar la cobertura de los servicios públicos como la
educación, salud, transporte, agricultura, etc. Y la realización de los
megaproyectos, como la descontaminación del río Mantaro, modernización del
Ferrocarril Central, reforestación de la selva central y riberas del río
Mantaro, implementación del frigorífico regional, terminación del túnel
Trasandino, etc.
En
conclusión, la Comisión Promotora
de la Macro Región
cree que los pueblos de los tres departamentos, Huancavelica, Junín y Pasco,
unidos por los recursos naturales que la naturaleza les ha dado, deben formar
una sola Región de dos millones de habitantes, cultural e históricamente
semejantes y a través de una real descentralización salir de la pobreza a la
que el centralismo los ha sumido.
Lima, 13 de setiembre
de 2011.